jueves, 29 de agosto de 2013

¡Hice la tarea! - Mere



Diseños inteligibles para tentar mi vista.
Ultrajado, corrió entre cuadros teñidos químicamente, había dicho.
Después insinuó “químicos, líquidos, lavar y tender”.
Inadvertida, tendí grandes cuadros, genuinos, invaluables.
Imperiosos hexágonos púrpuras, terracotas, azules:
¿Tanto movimiento corromperá nuestro habitual  narcisismo?
Tanta fobia desgarrada, fugitiva: sólo imagina
otras figuras, iguales ahora, perfectas.
Buscando motivaciones  quiméricas, astrales, inconscientes,
acelerando pecaminosamente ambos hemisferios.
¿Para qué tanta ilusión desenfocada,
mientras nuestras retinas, indiferentes,

temen percibir cuanto universo habite allí dentro?


Este texto es fruto (aún no maduro) del ejercicio de traducir un texto corto.
Mi idea fue traducirlo de tal manera que cada palabra traducida comience con la misma letra que la palabra del texto original. Costó un poco, pero aquí está. Nos vemos hoy, camaradas. Abrazo.

martes, 27 de agosto de 2013

El constructor- Alejandra


El constructor

Muros nuevos

Sobre ladrillos desgranados

Vigas despojadas de pasado

 

Bases ensambladas con pasión

Arquitecto de una vida programada

Que construye escalones de ilusion

 

Atrás los escombro de un amor

Alegrías que reciclan penas

Cemento que endurece el dolor.

 

domingo, 25 de agosto de 2013

Soy Ariel, ¿cómo están? Dejo un texto.

Mierda o arte

"Están supliendo el amor al arte haciendo palmas a los cantantes".
Desde que tenía uso de razón, Francisco recordaba preguntar qué había en la habitación prohibida. Creció sabiendo que después de la cena su padre entraba por horas. Lo único que podía ver desde afuera era una luz blanquecina.
Intentaba entrar luego de esos fines de semana donde iban decenas de personas a esa habitación. A los quince años, rompió la puerta y encontró que había otra puerta detrás. Con alegría, su padre vio en la destrucción un deseo y entendió que era el momento de conversar.
-Lo que te voy a mostrar puede cambiar tu vida-le dijo pausadamente. No sé si mi viejo y mi abuelo estarían orgullosos de lo que hago, pero me gusta pensar que sí, que ellos se quedaron a mitad de camino.
-¿A mitad de camino de qué?
-La clave de esto es el tratamiento químico, la documentación y la creación. Bueno, antes de todo eso viene la precaución. Ponete el traje protector.
-¿Podemos entrar de una vez y después me contás? – respondió cortando el clima de instrucción mientras se ponía el traje.
Francisco vio una serie de aparatos. No sabía para qué servían. Imaginó que eran para algún experimento, para curar una enfermedad. Después vio cuadernos apilados y una computadora. Sin saber qué eran, vio gubias, cinceles, gradinas y martillos de diferente tamaño. Su cabeza volvió a girar a la derecha, vio unas esculturas extrañas y no pudo asociarlas a su razonamiento. Fueron unos segundos de entendimiento y nuevamente las dudas.
-¿Qué es eso? ¿es mierda? – preguntó con una exagerada mueca de asco.
-No, es arte lo que hay en esos estantes – dijo el padre con seguridad. La de arriba a la izquierda es una reproducción de El grito. La que está a la derecha es mía y se llama Sinfonía cómica de sentimientos semi frustrados. La de abajo de todo, que es muy ancha, es una reproducción simplificada del Guernica. El que ves sobre el pedestal y vidriado es…
-Es el gol del Diego a los ingleses, algo sé. Están muy buenos, pero parecen ser de mierda.
-Sí, es arte hecho con mierda. Con la tuya, con la mía, con la que me alcanzan las personas a las que les gusta mi obra.
El adolescente miraba a su padre como si fuera un criminal. En esa habitación sólo se oía el aire acondicionado.
-¿Nunca te preguntaste por qué en tu escuela hay inodoros y acá no?
Francisco escuchó pero siguió pensando. No era eso lo que le importaba.
-Hace 9 años que me mandás a escuelas de arte. Leí lo que la crítica piensa de John Duncan y su vasectomía en Blind Date. También hice el seminario de mierda en el arte, nos reímos mucho con todos esos locos.
-No sabés de lo que estás hablando. Hijo, te guiás por lo que dice gente que enseña arte.
-Esto no es Mierda de artista de Manzoni. Esto ni tiene significado, no tiene sentido. Estás loco, esto es un desastre, quién puede pensar que esto es arte.
-La venta de mi Alegoría platónica de la caverna subvertida por la postmodernidad pagó esta casa. Es arte para mí, es arte para mis alumnos, es arte para los que pagan para venir a mis exposiciones y sin dudas es arte para el que lo compra.
Francisco creyó que su padre estaba loco y asoció con esa habitación todas las historias que le contaron sobre por qué huyó su madre.
El padre pensaba que quizás se había apresurado, tal vez su hijo era rebelde para romper una puerta, pero no para cuestionar las jerarquías que había estado aprendiendo durante toda su vida.
Estuvieron días sin hablarse. Ninguo quería dar el brazo a torcer y cada vez que intentaban conversar terminaban discutiendo entre cuestionamientos e insultos. Finalmente, llegaron a un acuerdo.
Francisco se incorporaría a las clases mensuales que daba su padre. Serían cuatro clases y si al llegar al cuarto mes él seguía pensando de la misma manera no se hablaría más del tema.
En la primera clase, el profesor mostró las documentaciones de su abuelo, su teoría sobre qué mierda era la mejor para hacer arte. También habló de los cuadernos de estudios de su bisabuelo, que intentó descubrir cómo sacar el olor a la mierda pero no lo logró.
En la segunda clase, todos los alumnos tuvieron que cagar en un tupper. El profesor fue mirando la materia prima mientras gritaba “el arte soy yo, el arte son ustedes, no necesitamos nada más”. Francisco se ponía colorado, pero veía las miradas de admiración en los alumnos y los elogios que murmuraban sin saber que él era el hijo.
El profesor mostró un aerosol sin etiqueta que quitaba el olor y aclaró que sólo podrían conocer la fórmula química quienes aprobaran el curso. Fue etiquetando los distintos recipientes con el nombre de cada alumno y explicó:
-Esta mierda ya está desperdiciada y lo importante es que entiendan por qué. Ustedes no van a saber cuándo es el momento ideal para trabajarla. Lo que tienen que hacer es ir tomando nota, aprendiendo de su mierda, del estado inicial y de los procesos que va experimentando luego de que se le quita el olor. Llévensela y póngala a 11 grados.
En la tercera clase, cada alumno comentó lo que vivió con su mierda. Todos la habían tirado al inodoro luego de un par de días, excepto Francisco, que había traído su tupper. El padre estaba orgulloso y lo dijo luego de la clase porque en ese momento prefirió hostigar a sus alumnos.
-Todos se guiaron por lo que dije. Había mierda que no tenía manera de llegar hasta hoy, pero la mitad de los tuppers que ustedes se llevaron podían haber sido trabajados en esta clase. Acá no es suficiente con creer o no creer, no es esa la línea que nos separa. La línea que nos divide es quererlo o no quererlo. También hay que estudiar, en los libros que les di está la clave de esto, no lo voy a explicar. Lo aprendí de ahí y ustedes pueden también, si tienen dudas me avisan. Ahora llenen el tupper y en la próxima clase hacemos una exposición con sus trabajos.
La noche anterior a la cuarta clase, Francisco salió corriendo de la habitación y buscó a su padre, a su maestro, para mostrarle su obra. No había hecho tiempo de sacarse los guantes de látex manchados.
-Entendiste todo en cuatro meses. Yo tardé una vida.
Francisco sonrió y dijo:
-Entendí todo, pero no sé si me lo hiciste entender vos.
-Pará, no te hagas el canchero. Yo tuve que retomar investigaciones, vos tuviste todo más servido.
-Yo te voy a jubilar, viejo.
-Primero vas a tener que aprobar el examen anual, sin eso no vas a poder usar más el aerosol. Te aviso que soy yo el que pone las notas.
Algo estaba naciendo y muriendo entre ellos. Ya no serían más padre e hijo. Tampoco rivales. Se miraron a los ojos y entendieron que era un momento inexplicable. Para romper el silencio, juntos agarraron la obra titulada Inodoro y la pusieron encima de Pedestal para la memoria colectiva, la primera obra que vendió el padre y que con los años pudo recuperar en una subasta.
Durante la muestra de la clase, los alumnos iban y venían por el cuarto haciendo comentarios. Inodoro despertó elogios y críticas y se armó un feroz debate sobre el real sentido. Unos creían que era sublime, otros que era una burla. Algunos criticaban su literalidad, mientras que unos pocos veneraban el nivel de circularidad de los significados.
Cuando todos se fueron, el padre le dijo a Francisco:
-Mi primera obra en realidad fue una puerta que tenía cadenas y a la cual mi viejo, mi abuelo y yo estábamos encadenados. Ninguno tenía cabeza. Detrás de la puerta estabas vos, que todavía no habías nacido. Tenías cabeza.

lunes, 19 de agosto de 2013

Hola chicos como les va tanto tiempo les quería pedir si alguno sabe que tenemos que hacer para el jueves me fui unos días de vacaciones y no entiendo mucho lo que mandaron por mail gracias Alejandra

domingo, 11 de agosto de 2013

Entrevista a Fabián Casas

en FM La Tribu, podcast:

http://fmlatribu.com/podcast/2013/08/09/fabian-casas-el-70-de-la-vida-es-un-cliche/

abrazos
S.

jueves, 8 de agosto de 2013


DANIEL FAUNES

Herramientas del grabado

Difuminadas trazas de la punta seca
testigo y testimonio de latidos
del corazón puesto en la mano.

Agujas : hirientes y afiladas saetas
que transitan la chapa.

Texturas de rebabas dispuestas,
sensibilidad sobre el blanco reflejo
del zinc pulido a espejo.

Nobles buriles labradores de tramas
e historias imborrables. Nubes sombrías,
triangulares, elevándose del suelo
del paisaje bonaerense, almas errantes
desfilando hacia los cóncavos cielos.


Incisiones y heridas grabadas en el cobre.

Los dúctiles metales sometidos
al genio del artista y artesano.

La línea que dibuja una mirada
En representación de quienes ya...
No nos miran.

Las herramientas duermen a la espera,
guardan para sí el dolor y la vergüenza,
del tiempo en que otras herramientas,
siniestros artefactos,  provocaron 
con tormentos la masacre
y nos dejaron las siluetas.





Herramientas2






Dialogan con la herrumbre,

Olvidadas, tiradas, envueltas con el polvo,


con la grasa y la quietud


del abandono.


Permanecen a la espera


de la sangre nueva.


En cajones amontonadas, impedidas.


Prisioneras, conviven en la escena


del taller que ha sido corrosivo


ácido de pasión controlada.

Allí está el metro midiendo

los tirantes, el goniómetro y la falsa escuadra.

El martillo, la maza y el cincel.

La francesa, la inglesa, y la estriada,

llaves y claves de apretadas tuercas,

los machos con sus hembras y terrajas.
Los niveles del mármol y el gramil de altura.

El punto con la punta en ele.

Mientras pendula la plomada con la brisa

y el ojo de sol alumbra los punzones,

que fabricó mi viejo, en la penumbra


de su taller fantasma,

cuando sin saberlo lo acechaba

el tiempo de los tiempos,

el lacónico, el inapelable reloj

que se detuvo. 


Y me dejó sus herramientas, 

que hoy duermen el letargo

a mi esperada y postergada suerte!








Herramientas3



Cizalla, guillotina, tijeras.

Cizalla o guillotina

del acero más duro, tijera

que troncha el hierro de gruesos espesores.

Inútil herramienta para cortar sutiles lazos

tejidos por los hilos de la baba del diablo.

Cuchillo de agua que atraviesa intersticios

socavando invisibles espacios moleculares:

inservible a trozar el perdurable aliento...



Laser lacerante que todo lo perfora

y controlado lee los mensajes cifrados,

ciego a leer los corazones armados,

fracasa en la hora de horadar los recuerdos, y

las memorias del cuerpo no las borra.



Ni las grandes muelas de widia

Ni el tungsteno de las sierras

Ni el diamante de los discos

Logran lo que logra la indiferencia

o la malicia, el desamor, y la estulticia

de una trituradora de sueños,

amores y esperanzadas fantasías,

en un cuerpo vaciado de sentido.






Herramientas 4



Un palito alargado en punta

una piedra afilada,

el tallo firme, atado

por otros más blandos,

planas, finas, cortantes

tiras de mimbre.

Sencillas, primitivas, esenciales.

Manos de las manos.

Artificios del barro de la remota tierra

en que floreció la agricultura,

e hizo nacer a la escritura.

Estacas, y estecas que juntas

trabajaron la arcilla, y ofrendaron el arte

en sacrificio.

Hermanas de cinceles y punzones,

rascadores incansables de ocultos

rituales: culto de las formas,

y simbólicas incomprensiones,

mudas metáforas amorfas.

Sustituciones precoces, materiales,

de la sensible fugacidad eterna.

Herramientas, primigenias

prolongaciones

de mano y pensamiento.

sábado, 3 de agosto de 2013

hola, acá les dejó parte de la charla de  Hebe Uhart en la UNLZ, de la que hablamos la otra vez:

http://www.youtube.com/watch?v=sjoasS6K01w


abrazos

*
Mauro: acá está la biblio de Uhart:

http://es.wikipedia.org/wiki/Hebe_Uhart

los Relatos reunidos están publicados en Alfaguara, supongo que se consiguen los libros más cercanos en el tiempo.
abrazo
S



viernes, 2 de agosto de 2013

consignas

hola, cómo andan
acá van unas consignas por si se quedaron sin:

* Para narrativa: Escribir un cuento de por lo menos tres partes o capítulos, incluyendo:
1 perro negro - 1 cuchillo oxidado - 1 botella de whisky -1 gitana - 1 noche en vela - 3 enanos - flores marchitas sobre una tumba
Puede incluir, como procedimientos:
+  un diálogo entre dos o más personas sobre algo o alguien que no se nombra
+  un soliloquio del protagonista (cuando alguien le habla a otra persona, pero no aparecen las contestaciones de la otra persona en el texto)
+  una descripción de una acción con mucho movimiento, p.ej.: cortar leña - apagar un incendio - una pelea entre varios/as - una relación sexual - cavar un pozo - etc.

* Para poesía: Escribir 10 poemas con un mismo tema:
Ventanas (de casas familiares, propias, de amigos, del trabajo, del colegio)
Animales (salvajes, mascotas, insectos)
Agua (ríos, mares, bebederos, corriente)
Instrumentos (musicales, utensilios de cocina, médicos)
Puertas (idem ventanas)
Herramientas (para construir una casa, de jardinería, de un taller mecánico)

utilizar la descripción como procedimiento principal, se pueden armar clasificaciones, describir situaciones con los elementos tematizados, relacionar ese tópico con otros, lo principal es construir una serie.

abrazos!
Santiago y Mauro